Pasión por los vinos varietales herreños

La isla de El Hierro cuenta con una bodega insular desde 1986 que produce la mayor parte de sus muy singulares vinos. Más aún en los últimos años cuando “la vinícola”, como la llaman los herreños, ha potenciado la producción con varietales de carácter muy especial. [En PELLAGOFIO nº 8 (2ª época, marzo 2013)].
Por YURI MILLARES
La Sociedad Cooperativa del Campo Frontera, propietaria de la bodega insular de El Hierro, realizó su vendimia de 2012 entre mediados de agosto y principios de octubre. En ese tiempo pudo recoger unos 155 mil kilos de uva de 138 socios, predominando la más tradicional y abundante en la isla, la blanca (94.380 kilos), pero con una importante y creciente presencia de uva tinta en el porcentaje total (60.132 kilos), fruto de la política tanto de la bodega como del consejo regulador de los vinos herreños, de primar el incremento en la producción de las diversas variedades tintas.
La pequeña isla de El Hierro tiene repartidas sus viñas entre los tres municipios en que está organizada su población, con tres zonas bien diferenciadas. Una es el valle de El Golfo (municipio La Frontera), con la muy apreciada verijadiego blanco reinando en la parte del monte y en torno al pueblo de Sabinosa, mientras en la parte baja de tan espectacular valle también se cultivan las no menos importantes bremajuelo blanco, baboso blanco, listán blanco, listán Negro y baboso. Otra zona es Echedo (municipio de Valverde), donde destacan la verijadiego blanco, listán blanco y listán negro. Por último, en la zona de El Pinar (el tercer municipio, en la parte sur), las variedades listán blanco, listán negro y verijadiego negro.
Todo ese abanico de variedades de uva, que llegaron a El Hierro para adaptarse y ofrecer lo mejor de sus posibilidades hace entre tres y cuatro siglos, permite a la vinícola insular desarrollar su política de elaboración de vinos originales y con personalidad, potenciando las cualidades que cada variedad puede ofrecer durante la vinificación.
El abanico de variedades de uva que llegaron a El Hierro hace entre tres y cuatro siglos, permite a la vinícola insular elaborar unos vinos originales y con personalidad

Los blancos más conocidos
Así, amparados bajo la marca Viña Frontera, están sus más conocidos blanco seco y blanco afrutado, o sus buscados tintos verijadiego o baboso. El blanco seco tiene la mezcla de uvas verijadiego blanco (60%) y listán blanco (40%), la primera aporta sus virtudes en acidez y grado, la segunda en finura y aroma (“De color amarillo con irisaciones verdosas. Aromas de fruta madura. En boca resulta fresco y frutal, equilibrado y estructurado”, leemos en su nota de cata).
El blanco afrutado, un vino que se obtiene después de parar su fermentación con frío para que tenga ese ligero dulzor, está elaborado con verijadiego blanco (60%), listán blanco (30%) y una mezcla de variedades autóctonas (10%) como son la bremajuelo, uval y pedro ximénez (“vino de color amarillo pálido, brillante y transparente; con finos aromas frutales y anisados; en boca es estructurado, equilibrado, fresco, persistente y con un final muy armónico”). De este vino también hay otra versión, el blanco afrutado selección, con un 90% de verijadiego blanco y el resto de listán blanco (“estructurado, equilibrado, fresco, persistente y con un final muy armónico, destacando su acidez que lo hace agradable para beber”).
Tintos varietales
Entre sus varietales destacan los tintos de uva verijadiego y de uva baboso. El verijadiego, elaborado en un 100% con este tipo de uva, se deja macerar durante 15 días en cubas de acero de pequeña capacidad para, explican en la bodega, “un vino muy rico para beber” (“color rojo granate con ribetes púrpura de capa media-alta; aromas a fruta negra, especiada y balsámica con fondo mineral de intensidad media y franca; buena entrada, carnoso, sabroso, taninos suaves, equilibrado y un final de boca agradable y elegante”). Existe también un verijadiego tinto barrica, elaborado del mismo modo, pero con el reposo añadido de unos meses en barricas de roble francés y americano antes de ser embotellado.
El tinto monovarietal de uva baboso negro se deja también macerar en cubas de acero de pequeña capacidad durante 15 días. Clarificado y filtrado tras la fermentación maloláctica, reposa seis meses en barricas nuevas de roble francés Allier y de roble americano (“color rojo granate intenso con ribetes púrpura; intenso y complejo con aromas de frutas silvestres, tostados, especiados; equilibrado en boca, con taninos golosos y paso elegante, armónico”).
Un vino muy especial es su tinto dulce, de las variedades baboso negro y verijadiego negro sobremaduradas, con un reposo en barricas de roble de dos años antes de ser embotellado
Un vino muy especial es su tinto dulce, de las variedades baboso negro y verijadiego negro sobremaduradas. Éste tiene un reposo en barricas de roble de dos años, antes de ser embotellado (“de color rojo rubí con tonos teja; muy potente y aromático, elegante; aromas a fruta negra pasificada, especiados, cacao, frutas en licor; en boca es sabroso, estructurado, equilibrado. Con compleja retronasal llena de matices”).
Completando la gama
Para completar la gama Viña Frontera hay que mencionar su rosado (listán negro y un poco de negramoll, con 12 horas de maceración en frío, un vino “color rosa fresa con intenso aroma frutal y ligeras notas florales; en boca es fresco y vivo, agradable y persistente”), su tinto tradicional de uvas listán negro y un poco de baboso negro, verijadiego negro y negramoll (cuya uva macera seis días a 25ºC, vino “de color rojo granate con buena capa; aromas especiados, regaliz, pimienta, mineral y frutal; en boca es estructurado, con buena expresión tánica, suave, persistente y con un final muy agradable”) y el tinto maceración carbónica monovarietal de listán negro (los racimos enteros fermentan en una atmósfera saturada de gas carbónico, dando un vino “rojo granate de capa media-alta; aromas intensos a fruta roja, plátano y violetas; fresco y vivo al ataque, estructurado y equilibrado con un agradable final suave y frutal”).
■ LA CATA
Sabrosos y aromáticos tintos
Por MARIO REYES
Sumiller y propietario de la tasca y tienda de vinos El Zarcillo, en Tafira Alta[row]
[column size=’1/4′]El verijadiego tinto barrica es oscuro, intenso, y con tonalidades granate. Su nariz bastante aromática, con notas casi de fruta pasificada (ciruela, dátil), indiscutiblemente marcado por su buena madurez. Al beberlo es un vino seco, con buena presencia de roble y sus tostados, con ¡un final sabroso y contundente! Hay que comer con él.
Sociedad Cooperativa del Campo Frontera
Marca: Viña Frontera Verijadiego tinto barrica.
DO: El Hierro.
Tipo: tinto monovarietal con pase por barrica.
Uvas: verijadiego negro (100%).
Añada: 2009.
Graduación: 15 ●[/column]
[column size=’1/4′]El baboso tinto, un poco menos intenso de color que su compañero, pero en la misma línea, al olerlo aparecen notas más de fruta y menos de madera y también más mentolados y hierbas aromáticas. Su boca es ligeramente dulzona, con algo de aspereza que lo hace más largo. Un vino para terminar una buena comida ¡y continuar con él!
Sociedad Cooperativa del Campo Frontera
Marca: Viña Frontera Baboso tinto.
DO: El Hierro.
Tipo: tinto monovarietal.
Uvas: baboso negro (100%).
Añada: 2009.
Graduación: 14 ●[/column]
[column size=’1/4′]El tinto maceración carbónica es de tonalidades casi violáceas, muy vivo a la vista. En nariz, ofrece aromas de media intensidad que nos traen recuerdos a regaliz negro, a plátano e, incluso, yogur; muy apetecible y maduro. Su boca es fresca y ligera. El vino se desliza sutil por el paladar y nos deja leves recuerdos de su fase aromática y un suave final. Servir fresco y tomar a cualquier hora.
Sociedad Cooperativa del Campo Frontera
Marca: Viña Frontera Maceración carbónica.
DO: El Hierro.
Tipo: tinto de maceración carbónica.
Uvas: listán negro (100%).
Añada: 2012.
Graduación: 13 ●[/column]
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