Científicos piden proteger el lenguaje silbado de Canarias
Además de en La Gomera, este lenguaje ancestral pervive también en El Hierro, Gran Canaria y Tenerife

Lingüistas de universidades francesas y varios Premios Canarias, entre otros, suscriben la Carta que pide «la protección del lenguaje silbado» también en El Hierro, en Gran Canaria y en Tenerife. Algunos de los firmantes lo explican aquí. [En PELLAGOFIO nº 122 (2ª época, octubre 2023)].
Carta de miembros de la comunidad científicacon el propósito de garantizar la protección, la continuidad y la investigación de las prácticas del lenguaje silbado en Canarias Las personas que aparecemos en la relación al final del texto, miembros de la comunidad científica, basándonos en nuestra experiencia en los campos de la Historia, la Etnografía, la Sociolingüística y la Lingüística aplicada (en este caso, con estudios de observación y análisis de palabras y frases silbadas por silbadores tradicionales de Canarias), con el propósito firme de garantizar la protección… [texto íntegro a continuación del artículo] |
Por YURI MILLARES

Ainiciativa del lingüista Julien Meyer (Université Grenoble Alpes y Centro Nacional francés de Investigación Científica-CNRS), Premio Europeo Marie Skłodowska-Curie Actions 2015 para investigaciones sobre lenguajes silbados, destacados miembros de la comunidad científica de Francia y Canarias firman una carta en la que piden tomar medidas para la protección del lenguaje silbado en Canarias. «Esta carta se ha enviado a aquellas instituciones y asociaciones vinculadas, de alguna manera, a la protección o a la investigación del patrimonio histórico-cultural, tanto a nivel local y regional, como internacionalmente», ha confirmado el propio Meyer a PELLAGOFIO.
La carta la firma igualmente la lingüista Colette Grinevald (Université Lyon 2), miembro del Grupo especial de expertos sobre las lenguas en peligro convocado por la UNESCO en 2003.
«Negar la existencia de evidencias probadas del uso de lenguaje silbado articulado en diferentes islas conlleva una pérdida irreparable» JULIEN MEYER, Centro Nacional francés de Investigación Científica (CNRS)
Según explica Meyer, la carta la envió para su firma a científicos «con conocimientos y experiencia en los lenguajes silbados», también del archipiélago. «Todos respondieron positivamente, incluyendo tres Premios Canarias y dos miembros de la Academia Canaria de la Lengua», ha señalado.
Premios Canarias
Los Premios Canarias firmantes son Antonio Tejera Gaspar, Maximiano Trapero y Manuel Lorenzo Perera. El resto de científicos y lingüistas que suscriben la carta son: José Juan Batista Rodríguez y María de la Cruz Jiménez Gómez (de la ULL), María Antonia Perera Betancor (ex directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias 2019-2023) y María Jesús Rodríguez Medina (ULPGC).
«El objetivo de la carta es reafirmar los principios y fundamentos que garanticen la protección, la continuidad y la investigación de las prácticas del lenguaje silbado en Canarias. Son doce principios que las instituciones públicas pueden tener en cuenta a la hora de adoptar medidas para la protección del lenguaje silbado en Canarias. Estos principios ayudarán las instituciones públicas a promover la tolerancia, el respecto entre islas y también priorizar el respeto a los últimos silbadores tradicionales de todas las islas», dice Meyer.

«Faltar al respeto a los últimos silbadores tradicionales, y negar la existencia de evidencias probadas del uso de lenguaje silbado articulado en diferentes islas conlleva, unido a la avanzada edad de muchos de los hablantes, la pérdida irreparable de las fuentes portadoras de este patrimonio (como decimos en esta carta)», advierte este experto.
«El lenguaje silbado es una de las numerosas manifestaciones milenarias que aún prevalecen en esta infravalorada despensa cultural que es el archipiélago canario» MANUEL LORENZO PERERA, Premio Canarias de Cultura Popular
Puestos en contacto con Manuel Lorenzo Perera, opina que «el lenguaje silbado es una de las numerosas manifestaciones milenarias que aún prevalecen en esta infravalorada despensa cultural que es el archipiélago canario. Muchas de ellas son desconocidas o llevan camino de perderse para siempre». Como parte de nuestra cultura tradicional y herencia de nuestros mayores, «constituye también el apartado más olvidado y marginado del panorama cultural canario», se lamenta.
Por ello, ante «nuestro mal principal, que es el desconocimiento», propone «meter de lleno (seria y permanentemente) la cultura tradicional en todos los centros educativos, desde la Educación Infantil a la Universidad». Es la única forma, dice, de «conocer, amar, difundir y defender cada uno de nuestros valores», algo que debe ser «una obligación institucional». Pero no sólo, «todos debemos “meter el hombro” en pro de su consecución».

«Hay que asegurar que las nuevas generaciones conozcan y sepan valorar el silbo canario como uno de nuestros tesoros patrimoniales» MARÍA JESÚS RODRÍGUEZ, doctora en Traducción e Interpretación de la ULPGC
Consultada también, María Jesús Rodríguez ha señalado que, «en los últimos años, se aprecia un mayor esfuerzo por parte de diversas instituciones canarias por difundir en la ciudadanía el conocimiento de nuestro patrimonio histórico-cultural. En este sentido, falta incluir en esas iniciativas el patrimonio intangible como es el caso del uso del lenguaje silbado en Canarias».
En su opinión, «lo que no se conoce no se puede proteger», por lo que «la labor de las instituciones es asegurarse de que las nuevas generaciones conozcan y sepan valorar el silbo canario como lo que es, uno de nuestros tesoros patrimoniales».
«No es que se hayan copiado de una isla respecto a las otras, el silbo existió desde tiempos ancestrales» MAXIMIANO TRAPERO, Premio Canarias de Patrimonio Histórico
«Los silbos han sido autónomos en cada una de las islas. No es que se hayan copiado de una isla respecto a las otras, no. El silbo existió desde tiempos ancestrales, seguro, con plena seguridad desde los tiempos de los aborígenes guanches en todas las Islas», dice Maximiano Trapero, catedrático de Filología Española de la ULPGC, durante su intervención en el documental El lenguaje silbado en la isla de Gran Canaria.
En el filme, presentado en el Paraninfo de la ULPGC y proyectado después en salas de cine, teatros y salones de plenos de ayuntamientos del archipiélago, está ya disponible en YouTube. En él participan muchos de los firmantes de la «Carta de miembros de la comunidad científica con el propósito de garantizar la protección, la continuidad y la investigación de las prácticas del lenguaje silbado en Canarias».
Carta de miembros de la comunidad científicacon el propósito de garantizar la protección, la continuidad y la investigación de las prácticas del lenguaje silbado en Canarias Las personas que aparecemos en la relación al final del texto, miembros de la comunidad científica, basándonos en nuestra experiencia en los campos de la Historia, la Etnografía, la Sociolingüística y la Lingüística aplicada (en este caso, con estudios de observación y análisis de palabras y frases silbadas por silbadores tradicionales de Canarias), con el propósito firme de garantizar la protección, la continuidad y la investigación del patrimonio canario en todas sus expresiones, y con el fin de facilitar, en el ejercicio responsable de nuestra profesión, el mayor y más preciso conocimiento sobre el tema que nos ocupa a la sociedad canaria, suscribimos los siguientes principios: 1) Que en lingüística se utiliza el término articulación para dos niveles diferentes del lenguaje humano (doble articulación): —Primero, para caracterizar cómo se pronuncian elementos sin sentido como vocales y consonantes (es decir, un inventario limitado de fonemas). —Pero también para explicar que los hablantes combinan estos fonemas ―articulados entonces en un segundo nivel― para componer elementos significativos (llamados morfemas o lexemas), produciendo así un inventario virtualmente ilimitado de palabras. 2) Que un lenguaje silbado basado en una lengua no tonal (como el español, el turco, el tamazight o el griego, por ejemplo) es aquel que articula las palabras de esta lengua y aproxima los fonemas de la variante dialectal hablada, con producciones sonoras llamadas producciones fonéticas que el individuo es capaz de emitir silbando. 3) Que damos fe de la existencia de lenguajes silbados en diferentes lugares y lenguas del mundo con procesos fisiológicos y combinatorios muy semejantes, donde el principio fundamental que se emplea es llevar el habla local al silbo. 4) Que conocemos, al menos, tres áreas geográficas en las que se ha evidenciado el uso del español en el lenguaje silbado: Tlaxcala (México), Almería (España, con la particularidad, en este caso, del uso de un elemento externo al cuerpo humano hecho de barro o corcho, llamado pito o boca) y Canarias (España). 5) Que, a pesar del retroceso experimentado en la isla de La Gomera a partir de los años 70 del pasado siglo, su pervivencia y las estrategias de conservación aplicadas en torno al cambio de siglo permitieron una recuperación en su conocimiento y en la divulgación. 6) Que los estudios realizados sobre el lenguaje silbado en La Gomera y en El Hierro impulsaron una nueva etapa de exploración de la documentación histórica existente y de investigación etnográfica reciente que atestiguan el uso de este tipo de comunicación, al menos, en La Gomera, en El Hierro, en Tenerife y en Gran Canaria. 7) Que esa exploración de los materiales existentes y nuevos trabajos de campo entre hablantes de Canarias confirman la supervivencia hasta nuestros días de personas que emplearon el silbo como lenguaje articulado y que lo aprendieron en su vida por transmisión tradicional en estas cuatro islas canarias (sin aprenderlo por una iniciativa de revitalización mediante una asociación o una escuela moderna). 8) Que, sabiendo que los principios para silbar articulando son los mismos independientemente de lo extenso del vocabulario empleado, el hecho de que se desarrolle más o menos en un lugar que en otro responde tanto a las necesidades históricas y condiciones orográficas y económicas, como al estado de vitalidad en el que se encuentren esas necesidades en el momento preciso en el que se realiza el análisis etnográfico o lingüístico. 9) Que las formas silbadas del español hablado localmente y practicadas por estas personas de las islas de La Gomera, El Hierro, Tenerife y Gran Canaria, están todas bien caracterizadas por la denominación lenguajes silbados articulados, aunque se pueden distinguir, en lo tocante a las particularidades propias de la modalidad dialectal de las personas silbadoras, las técnicas utilizadas para emitir el silbo, o el estado en el que se encuentren en el momento en el que se estudian. 10) Que todo lo anterior no va en menoscabo de la relevancia histórica de La Gomera en el desarrollo del silbo, sino que le otorga un rol pionero en la revitalización por la educación moderna y de mayor prestigio en impulsar una dinámica de protección en La Gomera. 11) Que, con la evidencia del uso de lenguaje silbado en diferentes rincones del archipiélago canario, no cabe a nuestro juicio argumento que justifique la desconsideración del lenguaje silbado empleado en cualquiera de las islas como un auténtico silbo articulado. 12) Que negar la existencia de evidencias probadas del uso de lenguaje silbado articulado en diferentes islas conlleva, unido a la avanzada edad de muchos de los hablantes, la pérdida irreparable de las fuentes portadoras de este patrimonio. Maximiano Trapero Trapero Antonio Tejera Gaspar María Jesús Rodríguez Medina María Antonia Perera Betancor Julien Meyer Manuel J. Lorenzo Perera María de la Cruz Jiménez Gómez Colette Grinevald José-Juan Batista-Rodríguez |